Riesgo de Deslumbramiento.

Con fecha 21 de marzo de 2019, la ONG Unión Internacional para la Defensa de los Motociclistas ha propuesto al Ministerio de Interior y a la Dirección General de Tráfico la incorporación en catálogo de la señal vertical P33a en tramos de vía afectados por el riesgo de deslumbramiento solar este/oeste u oeste/este (Expedientes 2019_SV_077 y 2019_SV_078)

El deslumbramiento solar es una de las causas de pérdida de orientación y control del vehículo más habituales. La causa se encuentra en la pérdida temporal de la visión y la reacción del conductor. Pero esta interferencia visual persiste o puede permanecer después de que la fuente de iluminación no incida directamente sobre la retina del conductor.

El deslumbramiento perturbador es causado por la luz dispersada dentro del ojo, provocando una nube de luminancia de velo, que disminuye el contraste y reduce la capacidad de percibir la información visual necesaria para una actividad en particular. La luminancia es una magnitud física que indica la cantidad de luz emitida por un ente luminoso. El deslumbramiento perturbador se produce como resultado de excesiva luminancia en el campo visual o por diferencias en la luminancia a la que el ojo no puede adaptarse. La fuente de deslumbramiento crea luz dispersa, que se extiende sobre la retina como un velo y reduce sustancialmente el contraste de las imágenes proyectadas en la misma (Ortiz Pacheco 2015).

Deslumbramiento

El deslumbramiento tiene una alta influencia en colisiones y choques (Mitra 2014). El deslumbramiento del Sol afecta a las distribuciones de velocidad y flujo durante periodos de congestión y no congestión (Auffray et al. 2007).

Queda claro que la probabilidad de la concurrencia de incidentes y accidentes aumenta cuando el resplandor del Sol afecta a la visión de los conductores (Mitra, 2014).

Como caso práctico, el kilómetro 439 de la antigua N-II, a la entrada del túnel sentido Zaragoza, presenta orientación este-oeste. Al atardecer y con cielo despejado, los rayos del Sol inciden sobre los conductores, la plataforma dispone de arcenes a ambos lados, dos carriles, uno para cada sentido y una vía para vehículos lentos sentido Zaragoza.

Los conductores, al atardecer se quedan sin visión hasta ser cubiertos por la sombra de la montaña perforada (túnel), que recuperan la visión antes de entrar en el mismo, para volver a ser deslumbrados a su salida.

Esta situación era la causa, durante las décadas de los años 80 y 90, de muchos siniestros de tránsito con el perfil de “alcance”. Una situación que descendió drásticamente al desdoblar la vía con la variante de Fraga, descendiendo la IMD y segregando el tráfico selectivamente y principalmente a ciudadanos conocedores de la zona y el riesgo.

Lo que demostraba que, si el riesgo era conocido con antelación, se podía adaptar la circulación a la circunstancia concreta del mismo.

Existen infinidad de ejemplos que abalan la necesidad de señalizar con antelación el riesgo de deslumbramiento solar. Recientemente se ha observado, por el departamento de Seguridad Vial, el alto riesgo de siniestro de tránsito en el acompañamiento y uso de la vía pública por transportes especiales de grandes dimensiones y baja velocidad, durante el amanecer o la caída del sol con orientaciones oeste-este o este-oeste respectivamente.

La norma técnica incide especialmente en el trazado este-oeste o el inverso oeste-este, recomendando que se evite esta disposición, pero como sabemos, en ocasiones es técnicamente y económicamente imposible evitarlo.

Entendemos que incorporar al catálogo oficial la señal vertical “P-33-a” ayudaría al conductor a identificar de forma anticipada el riesgo, pudiendo el conductor adoptar las medidas adecuadas para reducir el riesgo de siniestro, medidas como bajar velocidad, descender parasol, bajar protector solar del casco de protección, etc.

Informa para conocimiento público.
Dpto. Seguridad Vial
Unión Internacional para la Defensa de los Motociclistas