Hoy os contamos un truco en este trato con el derecho a la vida.

Queremos reducir el tiempo de respuesta cuando necesitamos frenar y bajar velocidad de forma importante.

Sabemos que ha 120 km/h recorremos en un segundo 33 metros. Nuestro tiempo medio de reacción es de 2 segundos, lo que nos hace recorrer 66 metros sin haber hecho nada desde que localizamos la incidencia.

Dicho de otra forma, a 120 localizamos un obstáculo en la autovía y recorrenos 66 metros sin haber empezado a hacer algo para evitarlo.

A 90 km/h, velocidad Pere Navarro en carretera nacional y convencional, recorremos 50 metros sin haber empezado a hacer algo para evitarlo.

Pero luego necesitamos un segundo o algo más, iniciamos acción de frenada, no podemos llegar a la maneta como locos y presionar sin control, necesitamos ejecutar las dos fases muy rápidos, aproximación, presión y tal vez liberación y esquiva.

El manillar debe estar sujeto y empuñado por el pulgar, anular y meñique. Los dos dedos, indice y corazón apoyados sin presión sobre la maneta del freno delantero. Y atentos…

Esta es la forma de rascar un segundo a la cuenta atrás y tal vez, salvar nuestra vida.

Atención, velocidad y calidad de la reacción ante la incidencia.

¡Funciona!… es un consejo del departamento de Seguridad Vial de Unión Internacional para la Defensa de los Motociclistas.

Dpto. Seguridad Vial